Adorar la Sagrada Eucaristía




Dinámica eucarística

“Te adoro con devoción Dios escondido, verdaderamente oculto en estas apariencias”. Palabras que desde el siglo XIII la Iglesia emplea para manifestar su fe y su amor. Los jueves tratamos de hacer esa adoración especial. La dinámica eucarística me invita a romper los límites en mi donación. La lógica de la Eucaristía es dar hasta el don de la vida.



Corazón que recibe

No fue ocurrencia de los hombres establecer la adoración al Sacratísimo Corazón de Jesús, sino iniciativa del Cielo. Y tampoco ubicarla como conclusión de la Octava de Corpus. Porque el Corazón de Jesús está en cada hostia. Y su actitud es siempre receptiva. Nos convertiremos, y ayudaremos a las conversiones, haciendo ver el amor de ese Corazón.



Vela de adoración

Jesús Sacramentado se merece nuestra adoración, porque es verdadero Dios. Por eso le damos no solo nuestros excedentes, sino también lo necesario. Y como el sueño nos es necesario, le damos también nuestro sueño. Estará muy contento con los adoradores nocturnos, y se sentirá consolado. Aprovechar que, en las Custodias, se ve a Jesús. Hemos pecado mucho con la vista. Ahí la purificamos.