Humanidad Santísima




La faz de Cristo

Al rezar el Ángelus se nos hace presente el misterio central de la historia de la humanidad: la Encarnación del Verbo. Además de la eficacia salvífica del mismo, podemos aprovechar el gran regalo de la Santísima Humanidad de Cristo para nuestra contemplación. Santa Teresa de Jesús es la gran maestra en este “representarse delante del Señor”.



Rumor en la comunidad postpascual

Los seguidores de Jesús que habían estado con Él en la vida y en la muerte comienzan a oír un rumor que se trasmite de boca a boca: ¡Dicen que está vivo! Y comienzan a llegarles testimonios de unos y de otros. Busquemos vivir con la conciencia del que está vivo, experimentando la más amable de las compañías y centrando en Él el amor de nuestro corazón.



Anula tiempo y espacio para conocer a Jesucristo

Nos sirve viajar a Tierra Santa, pero hemos de trasladarnos no solo en el espacio, sino también en el tiempo, yéndonos a la vida de Jesús. Sabemos que sus gestos y sus palabras son del único Cristo y están hechos y dichos para nosotros. Pero intentemos irnos al sentir de su Corazón, pues nuestro conocimiento de Jesús tiene que ser de primera mano.