Apostolado





Trigo y cizaña

En la sociedad encontraremos trigo y cizaña. Jesús cuenta con nosotros para seguir sembrando trigo. Podemos entender que ese trigo es la Eucaristía. Pensar en salvarnos solos no es cristiano. Sembrar trigo a voleo: manifiéstalo en todo, en cada detalle y cada signo.



Trasmite a otros tus encuentros con Jesús

Los amigos del paralítico que lo descolgaron por el techo sabían que bastaba “ponerlo delante de Jesús”, para que se obrara el milagro. En eso consiste la esencia de la vida espiritual y, gracias a ella, de todo apostolado. Decía el papa Francisco a los jóvenes: “También a ustedes Jesús dirige su mirada y los invita a ir tras Él. ¿Han encontrado esa mirada, queridos jóvenes?” Al intentarlo nosotros, podremos invitar a otros a que también lo hagan.





Nadie va al Padre sino por Jesús

Hacer que Jesús sea conocido y sea amado es una obligación de todo cristiano. El primer modo de hacerlo presente es con la coherencia de vida, manifestando el modo de ser cristiano principalmente a través de la caridad. Luego, con la palabra y la doctrina.