Cosa buena entre las buenas
San Josemaría pide recordar constantemente las “cosas buenas” que nos ha dado Dios. Reconozcamos las maravillas que nos regala y, entre ellas, la Santa Misa. Pensemos ahora no en el aspecto doctrinal de la misma, sino en nuestra relación afectiva con ella. ¿Amo la Misa? ¿La saboreo, la disfruto, me encanta? ¿Participo? Quizá sea oportuno buscar obstáculos: rutina, superficialidad, distracciones…