Transfiguración



6 de agosto

Tu propia transfiguración

El misterio de la vida de Cristo no se restringe a su Persona. Él nos revela cómo somos, y cuál es la sublimidad de nuestra vocación. Aunque no se note, estamos siendo transfigurados por su propia vida divina, la Vida que Él vino a traernos. Vida que se hace más intensa en la Comunión eucarística. Descubramos el Amor de un Dios que ha querido ser comida de sus criaturas.



Transfiguración: ver a Cristo

En la cima del Tabor los Apóstoles ven la gloria de Cristo. Manteniendo los ojos fijos en Jesús, acompañándolo por el camino ordinario, tendremos también un adelanto de la contemplación eterna.



6 de agosto

Transfiguración contemplación

Misterio que ilumina, que une el cielo y la tierra, que enseña a descubrir en Jesús el fulgor divino a partir del camino ordinario y doloroso de su Humanidad. No se es contemplativo por descontado; es una gracia que se ha de anhelar en la humildad y la pobreza. No hay dos caminos, el ascético y el contemplativo, sino uno solo.