El bautismo de Jesús y mi bautismo
El primer misterio luminoso es, como todos los misterios de Jesús, de una insondable profundidad. Jesús es bautizado para que pudiéramos serlo después nosotros. Hagamos un viaje en la historia, situándonos en el momento en que nuestros padres y padrinos nos llevaron a la pila bautismal. Revaloremos ese momento en que empieza a desplegarse en nuestra alma la vida nueva, la gran obra de nuestra divinización.