San Gabriel y las buenas noticias
Metámonos en el mundo de lo que no se ve, el mundo maravilloso de los ángeles. Meditemos sobre Gabriel, ya que Dios ha querido revelarnos su nombre y, por tanto, su personalidad. Y vemos que Dios le encarga traer a la tierra los mensajes del Cielo, particularmente la Anunciación. Aprendamos de Gabriel a traer el aire del paraíso, con nuestra alegría que participa de la Buena Nueva.