Unidad es vivir en Dios
Jesús pide al Padre que todos seamos uno en la Unidad de la Trinidad. “Yo quiero”, le dice, y el querer de Dios es omnipotente. La desunión es señal de muerte: que comprenda que la santidad es unión. En la Eucaristía se nos revela el profundo deseo de Dios para unirnos a Él.
Idea madre: Unidad
Estamos invitados a volver siempre a los temas fundamentales. Y son fundamentales porque tienen su origen en la misma Trinidad: Dios es indisolublemente uno, a pesar de ser múltiple. Defender la unidad, ausente en casi todos los ámbitos del ser humano, comenzando por él mismo. Que todos sean uno, como Tú Padre estás en Mí y Yo en Ti, que ellos sea uno en nosotros.
Vida unificada
Aprender la experiencia de Cafarnaúm: recibió de Jesús gracia tras gracia; la constituyó en el principal punto de su predicación y de sus milagros. Pero la ciudad no se convirtió. Nosotros hemos sido agraciados por incontables bienes espirituales, ¿respondemos con total coherencia? En la fe, en las obras, en cada detalle. ¿Cómo lograrlo? Unificándonos en el amor a Jesús.