Unidad en Cristo
Los primeros cristianos eran un solo corazón y una sola alma. Comunidad fervorosa; la realidad de Jesús les era cercana, y María y los apóstoles los mantenían unificados. La unidad procede de la misma Trinidad, y es equivalente al amor entre las Personas divinas. Amando a Dios, todos con el mismo sentir, sin que nadie desentone, tendremos la más fuerte y segura de las unidades.