En la Misa mana la Sangre de Cristo
En cada Misa actualizamos el prodigio de la oblación de Jesús. Es el Sacrificio sin mancha, desde donde sale el sol hasta el ocaso. ¿Cuáles pueden ser las actitudes de los asistentes? ¿Parecidas a algunos testigos del Calvario… los soldados, los fariseos? O la de María, Juan y las santas mujeres, recogiendo tu último suspiro y la última gota de tu Sangre.