Abundar en la nueva vida
Jesús nos revela que Él vino al mundo a traernos una nueva vida, y a dárnosla en abundancia. Esa nueva vida fluye de su costado abierto en la Cruz: la Sangre y el Agua simbolizan los sacramentos del bautismo y de la Eucaristía. Ya estamos bautizados, pero… ¿nos alimentamos continuamente de la Eucaristía? Un día sin unión eucarística es un día debilitamiento interior.