Alcances de la Eucaristía
Nos sirve contextualizar el ambiente de Jerusalén, el Templo y los sacrificios de corderos, en la simultaneidad con la Última Cena. Es el paso de la figura a la realidad, cuando el Cordero de Dios instituye el sacramento de su Cuerpo entregado, de su Sangre derramada. Sensibilizar con la sensibilidad del Corazón eucarístico, es la garantía de eficacia.