10 de agosto
Prepararnos a la Asunción
Historia del niño protestante que se aprendió de memoria el Avemaría, y eso supuso el origen de su conversión. ¡Qué fuerza tiene el Avemaría!: en esas palabras se hace presente el momento de la alianza definitiva de Dios con la humanidad. Pongámonos al amparo de María en la perspectiva de la próxima fiesta de agosto, la solemnidad de la Asunción. Consagrémonos a su Corazón Inmaculado, siguiendo la invitación de san Josemaría.