Centralidad en Jesucristo desde María
En algunas películas hay un protagonista casi único que pasa por diversas situaciones. Así es en nuestra vida. El protagonista es Cristo, y el mejor modo de desentrañar sus situaciones es contemplándolo desde el Corazón de María, como sugiere san Juan Pablo II. Entonces nuestra centralidad no solo se dará en Cristo, sino llegaremos a la misma centralidad de Jesús, es decir, a su Corazón.