Nuestra Señora de Fátima



13 de mayo a 13 de octubre de 1917

En Fátima, Nuestra Señora pidió desagravio

En las apariciones de Fátima, María aparece triste. Y pide a los niños –y a todos– oración y penitencia. Asegura que muchos se condenan porque no hay nadie que rece y se mortifique por ellos. La autoridad eclesiástica aprueba como milagros las imágenes de María que lloran (en Siracusa, Italia, y en Akita, Japón). No la dejemos sola: acompañémosla con oración y penitencia.