
Las Normas de piedad llenan de amor
El Señor insistía en la importancia de la limpieza interior. No es lo de fuera lo que mancha al hombre, sino lo que sale de su corazón. Por eso necesitamos darle constantemente el buen alimento de los ejercicios de piedad. El beato Álvaro insistía en “darle mucha importancia a lo poco” en ese cumplimiento, Hagamos la prueba, y notaremos que la vida espiritual crece.