Cruz




Sube a Jerusalén

El miércoles de la II semana de Cuaresma el Evangelio recoge la invitación que Jesús hace a sus discípulos: subir a Jerusalén, para ahí ser entregado, azotado, crucificado. Es la invitación a acompañarlo en su Pasión, de la que sacamos fuerza para amar nuestra propia cruz.