Apostolado



Que nadie muera

Jesús, ante los fariseos, pone de relieve la importancia de la persona. Summa lex, salus animarum (la ley suprema es la salvación de las almas). ¿Paso por encima de cualquier consideración, y de cualquier obstáculo, para salvar almas? Buscar el celo que ardía en el Corazón de Jesús.