Apostolado



Saciar la sed de almas de Jesús

Jesús explica cómo, para el gran banquete preparado para nosotros, todos, sin excepción comenzaron a disculparse. Descubramos el dolor de su corazón al encontrar cerrados los corazones de los hombres. Pero cuenta con nosotros, nos envía a las calles y plazas, a los caminos y veredas, porque tiene ansia de que se llene su casa. Esa es nuestra tarea en la tierra: salvar almas.