Unción del Espíritu Santo
Quedaron todos llenos del Espíritu Santo. Es el gran prodigio expresado de modo muy sencillo, como suele hacer Dios. La acción interior del Santificador se compara a una unción, que da brillo y flexibilidad. Es imprescindible, para que Él actúe con eficacia, el silencio profundo de nuestros sentidos y potencias. ¡Vale la pena!