24 de junio

Que Él crezca y yo disminuya

Seis meses antes del nacimiento de Cristo celebramos a su Precursor. El Bautista es grande porque no se queda con gloria propia; toda su tarea fue ser heraldo de Jesús. Nos enseña a huir de la “autorrealización” y buscar el proyecto de amor creativo. Yo, pero no más yo, es la fórmula de la existencia cristiana que arranca en el bautismo. Como Juan, anunciar a Cristo.