Adviento



Dios hombre

En la encarnación del Verbo encontramos la más maravillosa revelación de la grandeza de Dios y de su Amor. Por ella recibimos gracia por gracia, es decir, la vida divina a través de la Santísima Humanidad del Señor. Y descubrimos nuestro destino: ser el mismo Cristo, haciéndolo presente en nuestra cotidianidad.