31 de diciembre
Caridad, Corazón de Cristo.
¿Un año más? ¿No sería mejor decir, un año menos? Todos los días, con el llegar de la noche, nos sumergimos en tinieblas. Y el tiempo se nos va de las manos: semanas, meses, años, como una remembranza de lo que terminará un día. Termina la vida, pero no el amor: terminus vitae, non amoris. ¿Cómo aprovechar el tiempo? Creciendo en el amor. Al final, es eso lo determinante.