Diciembre



7 de diciembre

Por tu limpia Concepción

“Llena de gracia”, la saluda el Arcángel. Queremos imitar esa pureza, sabiendo que nada manchado puede entrar en la presencia de Dios: “Bienaventurados los limpios de corazón”. Vigilemos para purificar el nuestro, tanto en los sentidos como en el espíritu, tanto activa como pasivamente. Adelantaremos el purgatorio y seremos introducidos en la vida mística.