Noviembre



27 de noviembre

Llámalo Padre

Enorme es nuestra deuda de agradecimiento con Jesús por habernos revelado al Padre celestial. Tenemos así una idea precisa de Dios, en la que no aparecen ya los rasgos de terror de los pueblos primitivos sino la confianza filial. Jesús nos enseñó lleno de cariño la oración para dirigirnos al Padre. Llámalo Padre muchas veces al día y recobra el Padrenuestro como se recobra un amor perdido.