12 de octubre
Virgen del Pilar: ánimo en el desaliento.
La aparición de la Santísima Virgen al apóstol Santiago, cuando este se iba de España desalentado por no haber conseguido evangelizar a los pobladores, nos habla de Ella como consoladora. Cuando traemos a nuestra mente y a nuestro corazón a María se nos abre un panorama de aliento, de cariño, que repara nuestros cansancios y decepciones al trabajar por Dios.