12 de febrero
Dame de beber
La maravilla de la oración se revela junto al pozo, porque ahí Jesús nos pide de beber. Quizá deberíamos hacer una reprogramación de nuestra forma de entender a Dios. Vamos a Él buscando recibir, cuando lo que realmente ansía es que le demos. Su sed procede de las profundidades de Dios, porque Él, es su esencia, es amor. Busquemos actuar siempre según su beneplácito.