Adorar la Sagrada Eucaristía



Ábrete al Amor eucarístico

Si la Eucaristía es el termómetro de nuestra fe y de nuestro amor, preguntémonos cuál es el nivel de nuestra eucaristización. El Señor hablaba de los lugares vacíos en los banquetes, pero también del que está en el banquete –tiene fe- pero no lleva el vestido adecuado, el del amor. Y entonces es “echado fuera”, ya que no participa de los beneficios de ella.