Familia



Familia del Cielo y de la tierra

La vida de Jesús no solo se contextualiza en la geografía y la historia, sino también en la genealogía. Nace de un padre y una madre conocidos, en un hogar, rodeado de cariño, como debe ser la llegada al mundo de todo ser humano. La familia de Nazaret es un trasunto de la familia de la Trinidad, y viene a indicar que el hombre solo se despliega en el amor que recibe. Solo entonces puede darlo.



Caná y la santidad del matrimonio

Jesús fue invitado a la boda con sus discípulos, dice san Juan en el capítulo segundo de su Evangelio. Él se hace presente en unas bodas y las santifica. La institución natural del matrimonio se convierte en realidad sagrada, convirtiéndola en canal de gracia. Pero… ¿es Jesús el centro de los hogares, para que se logre dar consistencia sobrenatural a los mismos?



La familia se hace en la Eucaristía

No es irrelevante que el Verbo encarnado haya venido al mundo en el seno de una familia. Recuerda el sentido último de nuestra identidad: seres para el amor. Y es en la familia donde se aprende la ciencia del amor gratuito. A imagen del hogar de Nazaret, una familia despliega su verdad si está centrada en Jesús. Y Jesús está en el Eucaristía.