Presencia Real



La Eucaristía nos alivia de nuestras penas

“Jesús a quien ahora veo escondido, te pido que se cumpla lo que tanto ansío…” La Eucaristía es Jesús, que nos da un adelanto del encuentro definitivo. Tenemos esta certeza que alivia cualquier pena: Él está con nosotros. “También de dolor se canta”, es el título de una película. Podemos hacerlo precisamente porque tenemos el consuelo de la Presencia viva de Jesús.