Contemplación



Mirar a Cristo es adelantar el cielo

Ora vitam beatam, aconsejaba san Agustín a Proba. “Pide la vida bienaventurada”. Es la culminación del proyecto divino, que desea hacernos inmensamente felices. Ese camino es la vida contemplativa, buscando la mirada de Cristo y dejándonos envolver por ella. Santa Teresa recomendaba hacerlo en tres pasos.