Contrición



Dolor razón de amor

Afrontar el sufrimiento, como hizo Jesús, para desentrañar todo su valor salvífico. Quien no sabe de penas no sabe de cosas buenas: penas es el traje de amadores



Hijo pródigo: contrición

En la víspera del cuarto domingo de Cuaresma, hacemos más viva la invitación de Cristo, que nos pide que lo sepamos acompañar. Aprendemos del evangelio del hijo pródigo, para ejercitarnos en la contrición y porque en él descubrimos la inmensa bondad del Padre.



Sintonizar en la Pasión

San Juan dedica nueve capítulos (del 13 al 21) a relatar el Misterio Pascual de Cristo. Abre el relato con el motivo: un amor hasta el extremo. Intentar la sintonía con Aquel que padecerá y morirá por nuestro amor. Apreciar, por ejemplo, el signo del crucifijo: Jesús sigue ahí. Y la meditación del Via Crucis, sabiendo acompañar cada paso de ese camino.