Seguir a Cristo, seguir la Estrella.

La Navidad no termina luego de la Epifanía, sino hasta el domingo siguiente, el Bautismo del Señor. Sigamos, por tanto, con los Magos, caminando en dirección a la Luz que es Cristo. Conocerlo, escuchar su Palabra, adorarlo, contemplarlo, descansar en Él. Invitaciones del papa Francisco que vuelven a señalarnos la única dirección de toda vida.