Noviembre



16 de noviembre

Volver a asombrarnos con la Sagrada Eucaristía

Meditamos el himno Adoro te devote, con el que buscamos encender nuestra fe y nuestro amor al Dios oculto en el pan. Descubrimos más y más al Dios escondido al percatarnos que es lo más importante del mundo. El que está ahora escondido es el mismo que veremos, de modo ya manifiesto, en la eternidad. Si no adoramos este misterio, corremos el peligro de banalizar el Misterio, y acabemos fallando en nuestra correspondencia.