Décimo cuarta meditación
– Curso de retiro para sacerdotes – 
Cuánto necesita el sacerdote a María

Jesús comienza su ser sacerdotal en el vientre de María. Es, pues, muy razonable pensar que María tenga un especial cariño y atención a los sacerdotes. En la Cruz Jesús confía a Juan el cuidado de su Madre, y a María el cuidado de Juan. El Apóstol acababa de recibir el Orden sacerdotal, y será cuidado por Ella, y él la cuidará a Ella. El sacerdote deberá, por tanto, promover la devoción y el culto a María.



Décimo quinta meditación
– Curso de retiro para sacerdotes – 
El Espíritu Santo en la vida del sacerdote

El religioso tiene la vida regulada: en este momento debes hacer esto y, en el siguiente, aquello. El sacerdote no tiene regla alguna, de ahí la imperiosa necesidad de escuchar al Espíritu Santo para discernir la voluntad de Dios. Al final, la santidad consiste en ser dócil a esas mociones. El sacerdote ha de discernir también la acción del Espíritu en sus parroquianos, tanto en lo relativo a su vida espiritual como en las iniciativas que surjan.