Pobreza



4 de octubre

La pobreza como valor

Giovanni di Petro Bernardone (1182-1226), mejor conocido como san Francisco de Asís, comenzó un movimiento de renovación espiritual en la Iglesia. En lugar de criticar el lujo de las cortes eclesiásticas, comenzó por reformarse él. Aprendamos a ver la pobreza como un valor, a necesitar pocas cosas, y las que necesitamos, necesitarlas poco. Tendremos la libertad para amar.

 

Pobreza para poder amar

Al joven rico le pide Jesús un desprendimiento total. Y dijo en otras ocasiones palabras análogas: “Quien no renuncia a todo lo que posee…”; “No se puede servir a dos señores”. La avaricia inaugura una nueva fe, la fe en un ídolo. Criterios para descubrir dónde puede el corazón tener esclavitudes que le impidan la libertad del amor.



Felicidad en la pobreza de corazón

Bienaventurados los pobres de espíritu. Jesús enseña las actitudes características del cristiano y muestra cómo sostenerse en la esperanza. Porque esta pobreza de espíritu es la conciencia de nuestra indigencia. Los anawim del Antiguo Testamento son los que esperan la consolación de Israel. Si no vamos con riquezas falsas podrá colmarnos la verdadera riqueza, la de Dios.