Humanidad Santísima



El camino es la Humanidad Santísima

Para llegar a Dios el camino es la Humanidad Santísima de Cristo. ¿Reconozco a Jesús de Nazaret, el hijo de José? Tiene un timbre de voz, que he de saber reconocer. La llamada a recorrer este camino no tiene límite: san Josemaría invita a meterse en las Llagas del Señor.



Milagros que salvan

Los milagros de Jesús no solo manifiestan su Poder infinito, sino que anuncian una Era salvífica. Como los enfermos de entonces, también ahora tocar a Jesús produce la curación. Por el oído y la vista, establecemos el primer contacto.



Que tome su cruz, que derrame su sangre.

En la liturgia anterior, el mes de julio se dedicaba a honrar la Preciosísima Sangre de Cristo. Ahora podemos hacerlo con la celebración de esa Misa votiva. Esa Sangre es preciosísima en Sí misma, por estar unida a la divinidad, pero también porque redime al mundo, y también porque Jesús nos da una prueba de su amor. Pagarle amando nuestra propia cruz, sobre todo la que Él nos envía.