17 de enero
Jesús es tu alma gemela
La invitación a ser sus amigos procede de Jesús, no de nosotros. Y Él, siendo como es Dios, se adapta perfectamente a nuestro modo. A veces encontramos en la vida alguien con el que hacemos química inmediatamente: cuánto más podrá Jesús ser nuestra alma gemela sin nos animamos a entablar con Él un trato de confiada familiaridad.