Vela de adoración
Jesús Sacramentado se merece nuestra adoración, porque es verdadero Dios. Por eso le damos no solo nuestros excedentes, sino también lo necesario. Y como el sueño nos es necesario, le damos también nuestro sueño. Estará muy contento con los adoradores nocturnos, y se sentirá consolado. Aprovechar que, en las Custodias, se ve a Jesús. Hemos pecado mucho con la vista. Ahí la purificamos.