Amor a Jesús



Que me absorba Cristo

Dios lleva adelante su plan de salvación “suaviter et fortiter”. Con su fortaleza, pero respetando la limitación de la criatura. Para redondear la fisonomía del Opus Dei, quiso Dios enviar a san Josemaría una locución interior a través de las palabras de Jesús que recoge san Juan: “y Yo, cuando sea levantado sobre la tierra, atraeré todas las cosas hacia Mi”. Dejémonos atraer, absorber, por Cristo.



Abre tu corazón a Jesús

En la sinagoga de Nazaret, Jesús es rechazado por los suyos: quisieron lincharlo. Habían convivido con Él y con su familia muchos años. El dolor del Señor sería particularmente hondo: Son heridas que me hicieron en casa de los que me aman. Abrir nuestro corazón a su presencia y a su amor.



Estar con Él

“Jesús subió al monte, llamó a los que quiso… para que estuvieran con Él, y enviarlos a predicar y a expulsar demonios”. Aparece el “nosotros”, que no consiste en la estirpe sino en la comunión con Jesús. Estar con Él va a suponer unirse a su alabanza al Padre y al cumplimiento de esa Voluntad. Pero también conocerlo en su interior, uniéndonos a su Corazón.