Nuestra actividad es estar con Él
Mc 3, 15: “Constituyó a doce para que estuvieran con Él”. El nuevo pueblo de Dios ha roto las razones de la sangre. Ahora se forma parte de él solo a través de la comunión con Jesús. Estar con Él es meterme en su Corazón humano, lleno de misericordia. Es adorar al Padre y cumplir su Voluntad. Es darle muchas alegrías, la primera que seamos felices. ¿Una buena práctica? Meditar las letanías del Sagrado Corazón de Jesús.
Jesús es mi pastor
Grandes controversias se suscitaron desde el principio de la predicación de Jesús: los judíos debían tomar una opción. También nosotros, y la invitación es a aceptarlo, confiando en Él y dejar que nos conduzca. En el salmo 22 nos revela Dios cuál es su oficio de pastor, y las maravillas que se siguen de dejarnos guiar por Él.