Estar con Jesús
Jesús subió al monte y llamó a los que quiso, para que estuvieran con Él. Eso ha hecho también con nosotros, y supone todo un reto el saber estar con Él. Porque la invitación es a un estar profundo, de coincidencia de corazones. Meditar las letanías del Sagrado Corazón, siguiendo el ejemplo de san Juan Pablo II.