Esperanza



Parábola de las vírgenes necias y prudentes

Las parábolas de Jesús son muy profundas, incluso algunas de ellas, como la de los trabajadores que, a distintas horas del día, son enviados a la viña, resultan desconcertantes. Pero en una primera lectura podríamos entender la misericordia del Corazón de Dios que paga generosamente incluso a aquellos que llegaron a la hora undécima. Y la obligación de evitar que nadie permanezca “parado en la plaza”, en estado pasivo, horizontal.



Viajeros con tres provisiones 

Tres cosas tenía para su viaje el romero / los ojos abiertos a la lejanía / el oído atento / y el paso ligero. Este versito nos recuerda que somos peregrinos, caminantes, viajeros, y que hemos de mantener la mirada puesta en la meta, atender a las mociones interiores y dirigirnos con alegría a nuestro fin. La esperanza es la virtud del caminante: estrella verde que permanece en la tierra.



Hombres de esperanza

El elefante Dumbo no vuela a no ser que tenga una plumita. En nuestra triste situación, necesitamos esa plumita para volar: la esperanza. Corregir actitudes pesimistas, sin permitir que se instalen. Le causaríamos un dolor al Señor, que por todas partes nos invita a confiar en su Palabra.