Apostolado



Saciar la sed de almas de Jesús

Jesús explica cómo, para el gran banquete preparado para nosotros, todos, sin excepción comenzaron a disculparse. Descubramos el dolor de su corazón al encontrar cerrados los corazones de los hombres. Pero cuenta con nosotros, nos envía a las calles y plazas, a los caminos y veredas, porque tiene ansia de que se llene su casa. Esa es nuestra tarea en la tierra: salvar almas.



Apostolado es darlo a Él

Corazaín, Betsaida, Cafarnaúm… ciudades cuestionadas… sus habitantes no se abrieron a la predicación de Jesús. Y eso les seguirá ocurriendo a sus enviados… y es que nosotros continuamos la misión del Señor. Meta tan alta no es posible sin la unión vital con Aquel que es el enviado del Padre.



Carácter sacramental y apostolado

El carácter sacramental es un poder que nos hace participar del sacerdocio de Cristo, de modo que podamos realizar acciones que exceden la medida humana. Marca espiritual indeleble que es, al mismo tiempo, un privilegio y una responsabilidad. Participar del sacerdocio de Cristo nos invita a corredimir con Él, dedicando nuestra vida a la salvación de los hombres.