Goza al Resucitado

En Pascua contemplamos los diversos pasajes de la Resurrección. En uno de ellos, los apóstoles no se la creían “de pura alegría”. Jesús les trae la paz y les pide que miren sus manos y sus pies, para hacerles ver que el Resucitado es el mismo que el Crucificado. A ti y a mí también se nos aparece, y nos llenamos también de alegría.



Magdalena en el sepulcro de Jesús

Ante la tumba de quien tanto ha amado, Magdalena llora. La ansiedad es buena cuando es la ansiedad del amor: estamos todos llamados a una amistad intensa con Jesucristo; lograrlo a base del trato cercano.



Ansias de Magdalena

El martes de la Octava de Pascua nos presenta la liturgia el pasaje de Magdalena que llora fuera del sepulcro de Cristo. Aprendemos de ella a llorar la ausencia del Señor, y a buscarlo con ansias. El centro del kerigma cristiano es Cristo resucitado, y hemos de purificar nuestro interior de cualquier otra atadura para poder verlo.