Creer en Cristo
En la segunda semana de Pascua se nos ofrece la conversación con Nicodemo. Hoy, miércoles, meditamos la reveladora frase de Jesús que dice: “Tanto amó Dios al mundo que le envió a su Hijo, para que todo el que crea el Él no perezca, sino que tenga vida eterna”. La fe es el inicio de la salvación, y determina el flujo de vida divina. ¿Cómo está mi vida de fe?
Actitud ante Cristo
Jairo, uno de los jefes de la sinagoga, pide a Jesús que resucite a su hija que acaba de morir. De camino, una mujer que padecía flujo de sangre resulta curada con solo tocar su manto. Preguntémonos cuál es nuestra disposición interior al acercarnos a Cristo. Especialmente al practicar normas de piedad: si hay total apertura de fe y confianza.
Auméntanos la fe
Nuestra vida es un viaje, y tenemos astros que nos indican la ruta: son los santos, luces de esperanza que nos señalan el rumbo. Celebramos a santa Teresa de Jesús, cuya luz principal se refiere a la oración. Es un trato de amistad con quien sabemos nos ama. Pidamos a Jesús que nos aumente la fe, que es un don gratuito del todo sobrenatural. Fe para ver la Mano de Dios en todo, y mantener así la paz.