Fe para ser apostólico
Jesús se compadecía de las muchedumbres al verlas cansadas y desorientadas, como ovejas sin pastor. ¿Me da dolor a mí también la multitud que camina sin sentido? La urgencia de salvar almas puede atemperarse en mí por la falta de fe: en la gravedad del pecado, en la eternidad del infierno, en la infelicidad de quien no tiene a Dios. Buscar los mismos sentimientos de Cristo.
Evangeliza de todas las formas
¿Dormidos o despiertos? El mundo aparece, en lo espiritual, como un desierto. Pero los cristianos estamos llamados a testimoniar la fuerza y la belleza de la fe. El apóstol verdadero evangeliza siempre, de todos los modos posibles.
Curar o dejar morir
¿Se puede salvar la vida a un hombre en sábado, o dejarlo morir? (Mc 3, 1ss) Jesús plantea esta pregunta, y nosotros la aplicamos a nuestra tarea de salvar almas. No dejemos morir a nadie, porque somos portadores de un mensaje de salvación. Detengamos con nuestra oración y acción esta apostasía silenciosa que lleva a la perdición a tantos.