Humanidad Santísima



Anula tiempo y espacio para conocer a Jesucristo

Nos sirve viajar a Tierra Santa, pero hemos de trasladarnos no solo en el espacio, sino también en el tiempo, yéndonos a la vida de Jesús. Sabemos que sus gestos y sus palabras son del único Cristo y están hechos y dichos para nosotros. Pero intentemos irnos al sentir de su Corazón, pues nuestro conocimiento de Jesús tiene que ser de primera mano.



Entorno de Jesús para conocerlo

Una de las primeras herejías del cristianismo fue la negación de una verdadera humanidad de Jesús. La realidad humana de Jesús nos ayuda a hacer que todo gire más en torno de Cristo. Nos sirven los datos de los eruditos para ubicarlo geográfica y sociológicamente. Conocer su personalidad, a través del Evangelio, para asimilarla a la nuestra. Mirar a Cristo a la cara para entrar en diálogo y encuentro con nosotros.



Jesús es Alguien concreto

La mujer cananea se dirige a Jesús abriéndole el corazón. ¿Hemos aprendido a tratarlo así? Esa confianza creciente en la oración confiada y abierta nos hace tratarlo como a Alguien vivo y presente. ¿Es Él el interlocutor que llena nuestra vida de alegría y de descubrimientos maravillosos?