Espíritu Santo



La principal de nuestras necesidades

¿Necesitas algo? Todos podríamos responder: sí, necesito más Espíritu Santo. Con Él, puedo entrar en el ritmo de la vida de Dios. San Efrén el Sirio habla de estar como una antorcha dispuesta para recibir el fuego, o como el marinero pronto a surcar los mares a la voz del capitán. Con el alma anhelante de secundar la acción del Santificador. El Espíritu Santo nos hará posible acceder a las nuevas etapas de la vida espiritual.



El Espíritu Santo es el amor que se nos da para amar

La unidad de la Sagrada Escritura nos lleva a entender unos pasajes con base en otros. Cuando Jesús nos revela que nos ama a nosotros como el Padre lo ama a Él, equivale a lo que dice san Pablo respecto al Amor que ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo. Entonces tenemos el Amor infinito, tenemos todo el amor, y entonces podemos amar al prójimo como Cristo nos amó, porque nos da el Espíritu de Amor.



Riqueza interior

  La revelación de las Personas divinas fue paulatina. Tenemos la plenitud de la Revelación al conocer a Quien habita en nosotros de modo permanente. ¿Cómo ser movidos más fácilmente por Él? Porque de la acción del Santificador depende la felicidad nuestra y la de los demás.