Humildad



23 de diciembre

El Nacimiento de Jesús es humildad

Los eventos de la vida de Jesús no son fruto de la casualidad, sino designios del Padre. Con ellos nos ilumina. Y encontramos una constante: la humildad, desde el nacimiento en Belén hasta la pasión y muerte. Con la perpetuación de la Eucaristía.



Zaqueo y la letanía de la humildad

Zaqueo, jefe de publicanos y rico, no tenía resuelta su ansia de felicidad. Sabe que la encontrará en Jesús, y no se detiene hasta encontrarse con Él. No le importan los respetos humanos, y tiene la alegría de recibir al Señor en su casa. Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes. La letanía de la humildad nos ayudará a que no se infiltren en nuestro interior los ataques permanentes de la soberbia.



24 de junio

La humildad de San Juan Bautista

Juan Bautista, llamado por Dios desde el seno materno y santificado en el vientre de su madre, da testimonio del Mesías a base de desaparecer él mismo. Toda su vida no tiene otro sentido que confesar al Salvador. Humildad profunda que hoy podemos aprender de él.